“Hay que sacarse la idea de que la teoría del Derecho está en la estratósfera”

El curso se desarrolla en 135 horas cátedra, divididas en 15 módulos

El profesor de derecho civil constitucionalizado-convencionalizado Carlos Depetris abrió un nuevo ciclo de los Cursos de Actualización sobre el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación en Cañadón Seco, Santa Cruz. Asistieron empleados judiciales de diversas localidades de la provincia.

Con un repaso histórico sobre como modificaron sus legislaciones los diversos países de Europa y América, el profesor de derecho civil constitucionalizado-convencionalizado Carlos Depetris inauguró ayer un nuevo ciclo de Cursos de Actualización sobre el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación. El objetivo es “sacarnos la idea de que hablar de teoría del derecho está en la estratosfera y no tiene que ver con nosotros: tiene que ver con nuestras prácticas de todos los días y partir del nuevo código va tener mucho más que ver toadavia”, afirmó el docente en la primera clase del programa, que se realizó en el centro cultural de Cañadón Seco, a unos quince kilómetros de Caleta Olivia, Santa Cruz.
Ante unas 200 personas, la coordinadora Escuela de Capacitación y Perfeccionamiento Judicial del Poder Judicial de la Provincia de Santa Cruz, Lilian Romero, hizo la apertura formal del encuentro y señaló que desde “el año pasado surgió la inquietud de cómo se iba a encarar la capacitación con relación a esta temática del código que sabíamos que iba a entrar en poco tiempo iba a entrar en vigencia y era imperativo que la gente estuviera preparada”.
El curso que comenzó ayer en Cañadón Seco es parte de una política pública de facilitar el acceso a la información jurídica que el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación viene desarrollando a través de Infojus. Para ello se organizan Cursos de Actualización sobre el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación en todo el país. Estas capacitaciones son a su vez accesibles y gratuitas.
“Desde la junta Federal de Cortes en esta inquietud llevada por reflejar al seno de la junta hizo contacto con la gente del Ministerio de Justicia que tiene muchísima inquietud con respecto a preparar a la gente sobre la temática del código ya así fue que se firmó un convenio entre el Ministerio de Justicia a través de Infojus y la junta Federal de Cortes, que permitió toda la organización de las capacitaciones”, agregó Romero.
Facilitar el acceso a la información jurídica
Por su parte, la directora de Ediciones Infojus, Laura Pereyra, destacó que “por primera vez” Argentina tiene un Código Civil y Comercial unificado y subrayó que “el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación está comprometido en facilitar el acceso a la información jurídica y en este compromiso es que estamos aca como en otras provincias del país”.
“A través de estos convenios nos facilitan los lugares y la posibilidad de llegar a ustedes los operadores jurídicos y a través de ustedes a la comunidad porque este código redactado en lenguaje más sencillo apunta a que seguramente se podrá conocer y ejercer sus derechos de manera más adecuada”, completó.
A su vez la directora de Infojus destacó que “estos foros se plantean para difundir la legislación pero también para proponerlas al debate de ideas”.
Al iniciar su exposición, el profesor Depetris insistió en que siempre hay un acercamiento entre la teoría y la práctica y subrató que el derecho “tiene que ver” con las prácticas cotidianas de los operadores jurídicos en particular y de la población en general. Y, luego de realizar un repaso por los cambios de legislación de distintos países del mundo, puntualizó en que “fueron cambiando drásticamente sus leyes con la incorporación de derechos humanos y que esos procesos que se vienen dando en varios lugares eran impensados hace cincuenta o sesenta años”.
“El derecho es mucho más que un conjunto de normas”
Depetris dijo que el antiguo código “consideraba al hombre, al sujeto en términos generales, un hombre en abstracto y con el cambio de código se busca concretizar el código del derecho” y destacó “la prevensión y responsabilidad civil por daños”. Insistió: “El derecho es mucho más que un conjunto de normas”.
En el intervalo de la primera clase, Dévora, que es empleada del Poder Judicial, explicó a Infojus Noticias que para ella este tipo de cursos resultan “indispensable” para desarrollar su trabajo. “Aunque sea un poco complicado poder asistir debido a la carga horaria, quisiera finalizar el curso porque todos los módulos resultan interesantes y nos preparan para enfrentar distintas situaciones en nuestro trabajo”, dijo.
El curso se desarrolla en 135 horas cátedra, divididas en 15 módulos y tiene una instancia de evaluación, no obligatoria, para quienes deseen obtener un certificado de aprobación. Aquellos asistentes que decidan no realizar esta evaluación, podrá recibir un certificado de asistencia. Los docentes que se hacen cargo de cada uno de los módulos, son especialistas en la materia, y muchos de ellos han participado en el proceso de reforma del Código.
Ya están en funcionamiento los cursos en Santa Fe, Rosario, Paraná, Río Gallegos y Santiago del Estero, Jujuy, Río Grande y Ushuaia. En la Ciudad de Buenos Aires, se inauguraron en la Sindicatura General de la Nación, en el Instituto de Capacitación Parlamentaria (ICAP) de la Cámara de Diputados de la Nación y el Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina (IUPFA).


Fuente: http://www.infojusnoticias.gov.ar/nacionales/thay-que-sacarse-la-idea-de-que-la-teoria-del-derecho-esta-en-la-estratosfera-8294.html

Las buenas ideas

Por Pablo Bernasconi

“Las buenas ideas son mariposas invisibles con las alas escritas. Revolotean entre nosotros sin que las veamos. A veces las confundimos con mariposas comunes, otras veces se nos paran en la cabeza o en un hombro y nos susurran lo que estábamos buscando. Algunas nos dejan las ideas flotando a la deriva o plantadas en lugares insólitos. Las buenas ideas nos empujan al inicio de algo mucho más grande que no podemos ver ni tocar, como el viento que reaviva el fuego. Al contrario de lo que se cree, las buenas ideas son muchísimas más que las malas, lo que pasa es que las malas ideas no son invisibles. La única forma de reconocer una buena idea es con el estómago. Se siente como una mezcla de hambre y vértigo, y se puede experimentar de forma artificial haciendo ayuno sobre una moto a 275 km/h. Pero nadie lo recomienda. Se trata de hacer algo con nuestras mariposas: un dibujo, una canción, un cuento. Si uno tan solo las deja ir, las buenas ideas simplemente cambiarán de dueño. Sin tristeza ni reproches se van volando hasta la primera persona que les haga caso.

Lugares donde es posible encontrar buenas ideas

Sentados en un sillón azul, sin tocar el piso con los pies.
Entre hojitas de papel glacé.
Del otro lado de las ventanas.
En el baño, cerca del techo.
Adentro de una caja de crayones (primero hay que gastarlos).
Entre fotos viejas de la abuela joven.
Abajo de las almohadas.
En los álamos, más bien llegando a la punta.
Entre los pelos de un perro salchicha.
En el fondo de cualquier tarro de pintura verde.
En el medio de un lápiz rojo.
En dobladillos, de pantalones a cuadros.
En los trenes, entre un vagón y el otro.
En la página 18 del noveno libro, empezando por la derecha, del estante más alto de la biblioteca.
En la esquina de Moreno y Los Radales, en Bariloche” (: 23-24).
A modo de ejemplo estos son los lugares que Pablo Bernasconi sugiere en su libro La verdadera explicación. Estoy segura que cada una/o puede ampliar esta lista con lugares de lo más originales. Si se animan, quedo a la espera de más sugerencias.



Bernasconi, P. (2012). La verdadera explicación. Buenos Aires: Sudamericana.

 Fuente:http://www.pensarconotros.com.ar/2013/07/27/las-buenas-ideas-pablo-bernasconi-2012/